Los dulces americanos son los postres del momento, sin duda. Todos alguna vez han oído hablar de los cupcakes, la tarta de queso y los panqueques, pero ¿Cuáles son los dulces estadounidenses más consumidos?
Magdalenas / Cupcakes
Se volvieron populares gracias a las innumerables películas y programas de concina donde se consumían estos ricos pastelillos. Son pequeños y suelen estar glaseados, aunque su decoración varía de persona a persona.
Tarta de queso
Es un postre mítico, extravagante y americano por excelencia. El cheesecake o tarta de queso, es el dulce típico de Nueva York. Aunque muchos remontan el su origen a la antigua Grecia.
En realidad no es exactamente correcto, porque las tartas hechas en la Atenas en los siglos posteriores se basaban en queso cuajado (granulado). Lo cierto es que la primera tarta de queso, tal y como la conocemos hoy, nació de la idea de Eliza Leslie (experta en gastronomía de Filadelfia) quien empezó a sustituir el requesón granulado por queso crema local para crear un pudín de queso crema.
Poco a poco, a partir de 1800, los quesos y la cultura láctea de Pensilvania, especialmente Filadelfia, comenzaron a conquistar Nueva York, todos se volvieron locos por el queso crema que los queseros neoyorquinos.
Brownies
Altos en calorías pero increíblemente deliciosos. Los brownies son cuadrados dulces de chocolate estadounidenses. La palabra brownie empezó a aparecer en América a finales del siglo XIX pero se refería a algo muy diferente a lo que se imagina, de hecho, algunas revistas de cocina de la época mencionaban las Brown Dinners, cenas basadas en la comida marrón donde se servían platos llamados Brownies: eran champiñones fritos en una sartén.
Los brownies como los conocemos hoy en día, son obra de Bertha Palmer, una adinerada feminista y filántropa, quien le pidió al chef de su hotel, Palmer Hotel, que preparara algo que pudiera satisfacer a sus invitados durante una de sus fiestas habituales y que también se pudiera comer con un tenedor pequeño. Su chef creó un pastel de chocolate tan rico que no necesitó glasearse, prácticamente el antepasado de los brownies.
Pastel de manzana
Cuando se piensa en Estados Unidos, es inevitable imaginarse un montón de tartas de manzana calientes y fragantes. El detalle más conocido del Apple Pie es la doble corteza y el relleno en su interior.
Este tipo de pastel es típicamente inglés y se remonta a la época medieval. El primero en aclarar la diferencia entre las tortas clásicas inglesas y americanas fue Jessup Whitehead, en 1889, en su enciclopedia culinaria: las tortas inglesas siempre están “encajadas” entre dos hojas, preferiblemente saladas, y en su mayoría se sirven muy calientes; Las tortas americanas, en cambio, se caracterizan por un relleno dulce y suave, con una sola capa o corteza bajo el mismo relleno y se sirven fríos.
En verdad, el American Apple Pie debe toda su fama a Inglaterra y sus recetas, pero también a Francia por la pastelería. Cuya receta rica en mantequilla, modificada por Sarah Hale a finales del siglo XIX, consistía en trabajar la mantequilla dividida en cubos para hacer la masa más suave y moldeable en lugar de esparcir la mantequilla entre una capa y la otra como hacían en ese momento. Poco a poco la receta de Hale se fue tomando y mejorando en los recetarios estadounidenses, hasta llegar a lo que ahora es la tarta de manzana que todo el mundo ama.
Panqueques
¡Al menos una vez en tu vida ha soñado con despertar como las estrellas estadounidenses y comerte un plato gigante de panqueques con huevo y tocino! Tanto para el desayuno como para la merienda, los panqueques siempre son buenos. Y, si los acompañas con arándanos son un verdadero placer matutino.
Rosquillas o Donuts
¿Cómo no pensar en Homer Simpson? No hay una persona que no sienta pasión por este dulce tan suave y delicioso. Hay miles de variaciones de rosquillas: rellenas, con glaseado de chocolate, fresa, con chispas de colores, etc. ¡simplemente no hay límite!
Pastel de calabaza
Un postre romántico, típico de la tradición americana. Los estadounidenses preparan pastel de calabaza para celebrar el día de Acción de Gracias. Una fecha muy importante para ellos.
Galletas
El auténtico hit de la repostería anglosajona. Originarias de Boston, las galletas son fantásticas masas de harina crujientes por fuera y suaves por dentro, caracterizadas por tener chispas de chocolate como decoración.
Whoopies
Originarios de Pensilvania, estos dulces tienen una forma redondeada y el relleno en medio de dos galletas. Decorados de mil formas, los whoopies pueden convertirse en dulces navideños.
Pasteles
Se trata un bizcocho decorado con una pasta de azúcar en el exterior que puede tener muchas formas y colores diferentes. Son perfectos para fiestas infantiles pero también se sirven como bocadillos.